En 1988, el Dr. Isaac Goiz, médico cirujano mexicano, descubrió los pares biomagnéticos y comenzó a estudiar y desarrollar la terapia de pares biomagnéticos. Debido a este descubrimiento, la Universidad Internacional de Oxford presentó al Dr. Goiz el Doctorado en Filosofía en Medicina Bioenergética en 1999.
Según la teoría detrás del biomagnetismo, un gran número de afecciones algunas de ellas complejas,están asociadas con cambios fundamentales en el nivel de pH de los órganos internos. Si un órgano o sistema físico tiene un pH equilibrado, el desequilibrio no puede desarrollarse.
Los cambios en el nivel de pH de un órgano o sistema físico están asociados con la presencia de virus, bacterias, hongos, parásitos, toxinas y otros factores dañinos.